David Pardo, director general de la cooperativa Federació Farmacéutica (Fedefarma),ha tenido siempre claro que, tras la convulsa situación que está viviendo el sector, nada volverá a ser como antes, informa IM Farmacias.
“No volveremos a ver la sanidad tal y como era”, asevera el directivo de la distribuidora catalana que, desde 1928, sirve a boticas de Cataluña, la Comunidad Valenciana y Aragón y que cuenta, en la actualidad, con 3.000 asociados. Fedefarma cerró el año pasado con una facturación de 700 millones de euros, con un balance positivo de 700.000 euros, y para este año, prevén quedarse cerca de esa cifra, aunque algo por debajo.
“Hay que tener en cuenta que en cuanto a explotación, tenemos dotados y amortizados 10 millones de euros de morosidad en los últimos tres o cuatro años. En nuestro entorno, hay 100 farmacias con ventas suspendidas y 25 en suspensión de pagos. Y en otras zonas, la cosa está mucho peor”. Y aunque la morosidad sea uno de los problemas crónicos a los que se enfrenta la distribución mientras la coyuntura económica no se relaje, David Pardo afirma que el sector ha de ser consciente del problema y hacerle frente. “Vemos el entorno con tranquilidad porque hicimos una serie de esfuerzos para adaptarnos al cambio que se estaba produciendo, un cambio radical de paradigma”. Tanto es así que el director general de Fedefarma afirma que será prácticamente imposible obtener un crecimiento superior al 2% en muchos años. Es más: el precio por receta está a niveles del año 2000 y considera que este año la facturación se puede situar en datos de 2003. “Quien no entienda lo que en este momento hay que hacer, tendrá dificultades”, apostilla. Desde el año 2010, cuando los problemas en el sector se agudizaron, desde Fedefarma optaron por cambiar el enfoque de trabajo con las oficinas de farmacia, sobre todo, para ayudarles a mejorar su rentabilidad. “La hemos mejorado en un 1% gracias a proyectos como FedintiA, que permite que la botica se pueda aprovisionar de uno en uno con la máxima rentabilidad. Federació cede todas las condiciones que obtiene de la industria a su asociado”.
Aunque no es lo único que ofrecen a los farmacéuticos. Para Fedefarma, el futuro pasa por un cambio de mentalidad en el concepto de farmacia. “El farmacéutico se va dando cuenta de la necesidad de gestionarla como una empresa. Si no lo concibe como un negocio, tendrá complicado adaptarse a la nueva realidad. Queremos ayudar y acompañar a la farmacia a la hora de tomar las decisiones para adaptarse a la nueva realidad”.
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